¿Valores morales?

¿Valores morales?

    Muchas habremos oído hablar o nombrar los “valores morales” de una persona, pero ¿qué son realmente? O tal vez deberíamos empezar por el principio, ¿qué es “la moral”?  Creo que esta vez es interesante acudir al origen etimológico de la palabra.Del latín moris, que significa “costumbre”. Así pues, podemos deducir que la moral se define com el conjunto de creencias, costumbres, valores y normas de una sociedad, que funciona como una guía para obrar. con lo cual, podría decirse que orienta la conducta y acciones de los individuos de la misma sociedad, determinando qué es correcto y qué no lo es. Pero, llegados a este punto, planteemonos ¿existe realmente un límite nítido entre estos dos conceptos?

    Me parece conveniente preguntarse a uno mismo: y para mí, ¿qué es la moral? En mi opinión, y basándome en el significado que me he ido forjando acerca del tema, he llegado a la conclusión de que l moral es algo que se adquiere. Es la capacidad que tiene el ser humano, gracias a una inteligencia desarrollada a lo largo de millones de años, de decidir y actuar del modo “correcto”. Debido a la subjetividad de esta palabra muchas veces los “correcto” para unos no lo es para otros. Y una vez apuntado esto, podemos movernos al siguiente punto: los valores morales. Palabras como respeto, humildad, tolerancia, libertad, amistad, igualdad, generosidad, solidaridad o valentía pueden darnos una idea de lo que representa esta expresión. Aunque para ninguno de los anteriores términos existe un límite claro entre  lo que es y lo que no es, hay algunos que seguramente ofrecen para todos nosotros una visión más clara de la realidad que representan. Sin mbargo, hay otros que no.

La tolerancia. ¿Qué significa ser tolerante? Considero necesario remarcar la diferencia entre tolerancia en cuanto respecta a las diferencias del otro (creencias, religión, raza, clase social, ideas, etc.) y aguante. Soportar críticas, insultos, agresiones, vejaciones o abusos de cualquier tipo no es tolerar. Incluso, analizando en profundidad ambos conceptos pueden llegar tener signidficados opuestos. Alguien tolerante no hará necesario el aguante de otros.

Otro valor que podría tener unos límites inciertos es la libertad. Y la pregunta a plantearse es la siguiente: ¿cuando somos realmente libres? Desde mi punto de vista, y supongo que desde el de muchos más, no. Ahora especificaré en qué aspectos. Para empezar, a nivel superficial somos una socedad sometida. A leyes, a gobiernos, a normas, e incluso muchas veces a nosotros mismos. Con este último punto quiero decir que, en un nivel más profundo que el de las cuestiones políticas, encontramos las normas que establece nuestra comunidad, nuestra religión -si es alguna-, nuestras costumbres y en definitiva la sociedd en que nos movemos. Y finalmente, en el nivel más personal está la capacidad individual de decidir qué hacer.

Así, y llegados a este punto, vemos cómo el círculo se cierra, pues es en el momento de decidir cuando somos verdaderamente libres. Me explico; el querer hacer “lo correcto” es una norma que nos dicta nuestra moral, por lo que depende de uno mismo el tomar una decisión u otra. En esa decisión gozamos de la libretad de elegir lo que queremos hacer, pero tal vez eso no sea lo “políticamente correcto”. Seguimos estando sometidos a una restricción tanto legal que nos marca los límites de lo que PODEMOS hacer, y a la vez una restricción social o moral, que nos indica lo que DEBERÍAMOS hacer.

Sí, todos tenemos esta capacidad moral de decidir qué es lo correcto. Lo difícil ahora, es averiguar cuál de las dos es la realmente “correcta”.

MyBelovedPages