Buen precio = buena vida

El Comercio Justo es una forma de conseguir que las personas que trabajan día a día cobren lo suficiente para que puedan cubrir sus gastos y vivan bién.

Normalmente la marca se queda con la mayor parte del dinero, el transporte con un cuarto más o menos y el productor se queda con tan solo unos céntimos.

Las empresas que colaboran en está idea del Comercio Justo, tratan de que esto cambie. También procuran que los niños tengan derecho a ir a la escuela y no a trabajar, como ocurre en algunos países, y así mejorar su educación.


Los productos de Comercio Justo son productos en los que trabajan muchas personas, a veces sin fábricas, y son demostradamente más sanos que los que compramos normalmente; por eso, es preferible comprar productos de este tipo.